Paseaba hace unos días por la ría de Punta Umbría y me tope con un puesto de libros. Entre los libros muy ordenadamente apilados encontré una fila de dvd's.
En medio de dvd's de cine francés - nouvelle vague - Belmondo surgió "El destino se disculpa".
Hoy he podido ver la película. Una comedia con una profundidad en el guión, que con los ojos de hoy apabulla, pasma, asombra y maravilla. Trata de la libertad, de las consecuencias de las elecciones tomadas, del AMOR, y de tener un proyecto de vida, de la superficialidad, de lo irrelevante y de la plenitud de la vida, entre otras cosas. Llamando AMOR, a lo que es AMOR.
Blanco y negro y ningún efecto especial. Ya por eso merece la pena la película.
Yo la recomiendo.
Una vez más doy gracias a DIOS por todo. Alabado sea DIOS.
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