ANÓNIMOS

Esta mañana la conserje de mi centro de trabajo me ha dado una carta sin remite. Una carta anónima. Recuerdo que la primera carta anónima que recibí fue en los primeros años de Universidad, en ella entre otras muchas cosas me decían que me odiaban. Supongo que el autor de la carta. Aunque en ella se afirmaba que estaba redactada por un grupo de amigos que me querían. Lo cual no deja de tener su cosa. Coincidió cuando empezé a conocer a una preciosa joven cordobesa, vivía en CAÑERO. Una joven alta, morena y de unos increibles ojos azul claro. En fin, un tipazo de quitar el hipo. Es posible que pensaran que tenía alguna relación amorosa con ella. No lo sé, el caso es que durante un tiempo fuimos buenos amigos. La carta también hablaba de ella, y me decía que me apresurara a declarame porque había muchos detrás de ella. Normal, era una mujer bellisima. Lo que nadie sabía es que ni yo le interesaba a ella, ni ella me interesaba a mi en ese sentido. Bueno, mejor hablo por mi. Lo del interés de ella, pues no creo que nunca pueda saberlo. Hace años que dejamos de estar en contacto. Ahora esas cosas se hacen por la red, aunque sigue siendo lo mismo de siempre: " Meterse en la vida de los demás, sin tener ni idea de que va la cosa". No hay nada nuevo bajo el sol.
Pero esta carta sin remite no tiene nada que ver con eso. Con cierta frecuencia recibo insultos, pero ahora es desde la red. Incluo en este mismo blog hay alguno, jejejeje. Pero ya se sabe que no ofende quien quiere, sino quien puede, así que ...... , ajo y agua, jejejejeje ...... .
Como decía esta carta no tiene nada que ver con eso. He de reconocer que es una carta adorable, me ha gustado muchisimo, divertida, ingeniosa, creativa, chispeante, original, y con un sentido del humor muy singular. Me he reido, ¡¡¡¡¡¡vive DIOS, cómo me he reido!!!, mis carcajadas han resonado por todo el centro. Aún no se me ha ido la sonrisa ni de los labios, ni del alma. Se lo agradezco a DIOS, porque estas son las cosas maravillosas de la vida. Sin duda alguna, LA VIDA ES BELLA.