ROHMER: Otoño e invierno

Acabo de disfrutar de "Cuento de otoño" y de "Cuento de invierno". La fascinación que me produce ROHMER puede ser por muchos motivos, y seguro que de la mayoría no soy consciente. Pero creo de algunos si que soy consciente. Por ejemplo: los personajes que presentan no son caricaturas, ni esquemáticos, sino personas casi de carne y hueso. No son ni buenos, ni malos, son seres humanos. También me gusta porque recrea las relaciones humanas con todas sus miserias. Porque recrea la sociedad que no conocía ni el móvil, ni la red, ni nada de nada de eso. Y los problemas que presentan son los mismos. Con lo que parece que la esencia del ser humano, no depende nada más que de uno mismo, del ser humano. Hay mucha vida en estos cuentos, hay mucha vida de verdad de la buena, de la de todos los días. De la normal y corriente. De la de las meteduras de pata y de las ilusiones cotidianas. Este cine me parece tan de verdad que me engancha y me queda absorto.
Cuento de invierno, por ejemplo trata de muchas cosas. Trata el tema de le FE y de la oración de una forma y de una sencillez humanisimas, con una maravillosa naturalidad.
Pero sobre todo y como es obvio, presenta que la felicidad, y la esencia del ser humano es el AMOR. Por eso nada que no se centre en el AMOR sirva para nada. Y eso es lo que sabemos todo. AMAR sirve lo demás no. Todo lo que salga de uno que no sea AMOR, nos deshumaniza y nos embrutece.